Sergio Ramos espera que el Real Madrid recurra la expulsión que sufrió por roja directa ante el Manchester City en el Bernabéu en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones para tener opciones de disputar la vuelta el 17 de marzo en el Etihad, donde el conjunto blanco intentará remontar el 1-2 encajado en su estadio.
El Madrid estudió en un primer momento presentar un recurso por la expulsión de su capitán, que a cuatro minutos del final del partido derribó al brasileño Gabriel Jesús cuando se marchaba solo hacia Courtois con 1-2 en el marcador, al entender que el castigo del colegiado italiano Daniele Orsato era excesivo.
El recurso aún no se ha trasladado a la UEFA, que todavía no ha publicado las sanciones de la ida de los octavos de final, y, según informaron a Efe fuentes del club, provoca debate interno por el peligro que se puede correr de que el castigo sea mayor. Ramos, sin embargo, dejó claro su deseo tras el clásico del domingo ante el Barcelona.
El capitán madridista defiende que «es un toque muy leve» el que tuvo con Gabriel Jesús y que «se puede pitar o no». Por eso espera que el Real Madrid recurra y agote las vías para que pueda estar presente en el encuentro de vuelta en el Etihad.